Si las sesiones que se realizan en el Concejo Deliberante fueran presenciadas por los vecinos, máximos interesados de las cuestiones que este organismo resuelve, seguramente el voto de algunos concejales seria diferente. Probablemente, la decisión de los ciudadanos a la hora de elegir representantes, también seria otra. Presenciar las sesiones desenmascara las hipocresías; pone blanco sobre negro las verdaderas intenciones de los ediles.
Las PASO trajeron como consecuencia una carrera maratónica por demostrar quién presentaba más proyectos para el supuesto provecho de la comunidad. La falta de servicios elementales, como agua corriente y cloacas, desnuda sin medias tintas la falta de interés de este ancestral gobierno por la salud y el bienestar de la ciudadanía. Esta situación fue aprovechada por el concejal siempre en campaña, Edgardo Paso, para presentar un proyecto de red de Agua Corriente para Ostende y Valeria del Mar que, al decir de sus colegas, es incompleto, carece de los informes técnicos correspondientes, del estudio de impacto ambiental, entre otras cosas.
Otro de los temas que generó controversias fue quiénes debían hacerse cargo de costear la obra. Así fue como el concejal Roberto Porretti, en tiempos de campaña, realizó una conferencia de prensa para anunciar que había conseguido un subsidio del Servicio Provincial de Agua Potable y Saneamiento Rural (SPAR), un órgano gestor que recomienda la realización de obras ante el Ministerio de Infraestructura. Es decir, a Pinamar no llegaría el dinero para realizar la obra, sino la obra.
Esta situación generó los resquemores de Paso que, alegando apuros poco convincentes, insistía en no esperar la firma del convenio con el responsable del SPAR, Juan María Viñales. Para que esto pudiera ocurrir y la obra llegara a Pinamar, varios ediles propusieron una ordenanza que autorizaba al intendente interino, Hernán Muriale, la firma de este convenio. Pero, increíblemente, la ordenanza fue rechaza por los cinco ediles de siempre, esos que tienen asegurada la mayoría automática que no permite que la democracia funcione.
Aún así, se logró posponer el tema, cuarto intermedio mediante, hasta el lunes 2 de septiembre.
La Asamblea
Con varias ausencias de los Mayores Contribuyentes y el reemplazo del MC Javier Paso por Mónica López, el lunes 2 el HCD reinició la Asamblea.
Luego del apuro inusitado antes de las PASO por aprobar su proyecto "Agua para todos”, el lunes 2 (elecciones magras mediante), Edgardo Paso fue el primero en tomar la palabra para solicitar un cuarto intermedio hasta el jueves 12 para estudiar la propuesta presentada por el Poder Ejecutivo a través de la directora de Planeamiento y Obras Publicas, Bravo Almonacid. Esta iniciativa promueve la creación de un Fondo de Preservación del Recurso Hídrico. Paso recordó, también, que “se sigue a la espera de la firma del convenio con el SPAR”.
Rosana Di Pascuale resaltó la precariedad del proyecto presentado por su par y explicó los Artículos 2 y 7 de la Ordenanza 165/73 referentes a las obras públicas municipales de infraestructura urbana. “Los proyectos para licitación deberán contar con indicación del tipo de obra y memoria descriptiva, planos generales y de detalles, presupuesto detallado, especificaciones generales y particulares, legales y técnicas” etc.. Según Di Pascuale, “nada de esto existe en el proyecto de Paso”.
El Mayor Contribuyente del PJ, Antonio Nercellas insistió en que el convenio con el SPAR no fue firmado aún porque el intendente interino no llamó al responsable de la entidad: “El gobierno no hizo absolutamente nada para obtener el financiamiento provincial”. Pedro Elizalde (quien ocupó el sillón de Caporale por 10 días), explicó que, vía Bravo Almonacid, la intendencia se había comunicado por teléfono con Vignales solicitando que le enviara el convenio para la realización de la obra que demandará $12.000.000, vía fax. “Pero el documento no llego”, dijo el edil. Ante esta falta de respuesta telefónica de una autoridad provincial, Elizalde se rebeló:”Vignales es un funcionario, no un magnate”.
Gabriel Vidauli objetó la forma en que el Poder Ejecutivo pretende conseguir esta obra. Refiriéndose a las palabras de Elizalde, preguntó: “¿Les parece que, con un llamado telefónico, nos van a hacer creer que están haciendo gestión? Una gestión tiene papeles, fechas, firmas, etc. Lo demás es aire. Es nada. ¿Así manejan la administración pública? Por eso presentan proyectos sin avales, sin los pasos cumplidos. Esto es un mamarracho que desnuda las mezquindades personales. El subsidio es cierto pero nadie hizo nada. Pareciera ser que “o se juega con mi pelota o no se juega”.
La intervención de la ahora MC de Paso, Mónica López, encarnando los urgentes intereses de “Doña Rosa y a Don Juan”, lejos de apaciguar los ánimos, le mereció que los concejales le recordaran su responsabilidad a la hora de ser aprobado el nuevo Código Tributario que significó el aumento exagerado de la tasa municipal en una asamblea cuestionada por irregular. ”Si se hubiera aprobado el proyecto tal como estaba, hubiera estado mal. El consenso no implica aprobar cualquier cosa”, le respondió Taurizano. “¿Es muy difícil que el intendente concurra en persona a encontrarse con el presidente del SPAR en busca del financiamiento de la obra de red de agua corriente?” pregunto el MC de Taurizano, Fabián Rivero.
Finalmente, Roberto Porretti tomó la palabra para aclarar el proceso en el que se gestionó la obra: “Hay dos caminos para hacer esta obra. Nosotros tomamos una iniciativa de gestión política. Ya había una documentación presentada por la CALP en el organismo. Era necesario que se produjera una conversación política entre el intendente y el presidente del SPAR”. Y agregó: “Es una locura que no se haya aprobado una ordenanza por la cual se autorizaba al intendente a firmar un convenio para obtener la obra. Se hizo todo lo posible para no traer la obra”.
Finalmente, los presentes votaron por unanimidad el cuarto intermedio para el jueves 12 de septiembre a las 17:30 en espera del proyecto de Bravo Almonacid.
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