Esta mañana los concejales, Claudio Galarza y Gregorio Estanga formaron parte de la segunda y última sesión ordinaria del mes de julio con treinta y cinco puntos en el orden del día. Entre ellos se destacó la modificación de la ordenanza que reglamenta el traslado y comercialización de la arena (OM 4528/14).
En el recinto se contó con la presencia del secretario de Gobierno, Guillermo Benítez, quien se había acercado para exponer algunas objeciones al proyecto.
Por su parte el concejal Estanga presentó modificaciones que se consensuaron en un cuarto intermedio. Las reformas fueron esenciales, según la mirada de este bloque, para lo cual se agregó en el articulo dos del proyecto: “El Departamento Ejecutivo deberá exigir la guía de minería, para que las autoridades de control se aseguren la procedencia, destino y la cantidad de metros cúbicos de arena comprada en las canteras habilitadas.
Y en el inciso “a” del mismo artículo se agregó: “Queda prohibida la extracción y remoción de la arena de playa, ni la emergida, ni la sumergida, con excepción de los trabajos debidamente autorizados por la Dirección de Frente Marítimo, en cumplimiento del mantenimiento del pie de duna, tareas de refulado provenientes de los enquinchados, y la nivelación para la colocación de carpas”.
Otro de los temas destacados de la sesión se refirió a la entrega de un terreno en comodato a la colectividad peruana. El bloque del FpV se abstuvo en este punto por considerar la necesidad de un proyecto cultural integral. Por otra parte es válido aclarar que los ediles de este espacio opinan que la norma no fue aprobada ya que no contó con los dos tercios que exige la ley.
También se votó por unanimidad la ordenanza por la cual se entregarán las viviendas residenciales unifamiliares a familias de alta vulnerabilidad. La ordenanza tiene como objetivo sustancial “intervenir, recuperar los espacios y garantizar el acceso a la vivienda”.
Los ediles expresaron en sesión la justificación del voto positivo:
“Lo peor que nos puede pasar es no hacer nada”, dijo Estanga. Y agregó: “Hay que trabajar para que no haya más asentamientos. Nuestra responsabilidad es mirar a todos los sectores y reintegrar la calidad de vida, planificar el Pinamar que queremos y garantizar que no haya más ocupaciones”. Por su parte el concejal Galarza expresó “la importancia de acompañar al DE en este logro así como garantizar la vivienda de aquellos que aún no la tienen y están alquilando o viven con sus padres”.
En relación al texto de la ordenanza el cuerpo Legislativo introdujo modificaciones al proyecto del DE asegurando que el traslado de las familias (barrio “la palangana”) sea en su totalidad, de manera simultánea y que, paralelamente, se realice el desmantelamiento de las casillas y que el Municipio tome posesión de las tierras para evitar nuevas ocupaciones.
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