En una entrevista desfigurada con interpretaciones erróneas, el Intendente destituido punteó un panorama pinamarense fuera de la realidad del conjunto de circunstancias que llevaron a que el cuerpo de ediles de entonces lo destituyeran por 31 puntos en su contra. A ello se sumó la prensa nacional que exhibía el oprobio de la ocupación de casas destinadas a fines sociales, así clasificadas por el Banco Hipotecario, por parte de su familia (hijas).
“Todo sigue igual. La situación nacional también nos afecta…” manifestó Don Blas Antonio por los micrófonos de Azul. Por otro lado en su ensamble discursivo y misceláneo lanzó que “la actitud de la dirigencia política no había cambiado” y le imputó al Concejo Deliberante (para él, el culpable de todos sus males) estar conformado por once bloques. Nadie le avisó que los bloques están conformados según las candidaturas presentadas en las últimas elecciones de 2013, con la excepción del bloque del Frente para la Victoria que obligó a Ocampo a dividirse de su segundo, Juan José Dos Santos, que resultó ser un infiltrado del MUPP. Y al mismo tiempo se negó a formar coalición con Germain, aliado al Gobierno municipal. La otra excepción es la de Edgardo Paso, también socio del MUPP, que ingresó al HCD por una alianza electoral que los radicales lamentan hasta hoy. Son seis los bloques legislativos, y no once, con la incorporación de dos ediles más al cuerpo.
Pero en las entrevistas a “Don Blas” no se lo contradice.
“Armar un gabinete con gente que no es de tu equipo no sirve” afirmo, refiriéndose a Baldini en respuesta a un comentario del periodista. “El acuerdo fue obligatorio para poder gobernar. Yo no lo hice y a mí me destituyeron”, se justificó Altieri.
Bajo conceptos mesiánica y acomodándose en un diálogo meloso dijo que: “Pinamar nada en el descredito”, producto de su destitución. Una vez más no pudo separar su “Yo” de la comunidad. Como Luis XIV se afianzó en “Yo soy el Estado” para caer en contradicción con la administración de su poyo: “Nos no manda nada (por la Provincia y Nación). Y automáticamente corrigió: “Pero pese a todo la cosa se va normalizando. Vamos a seguir avanzando. Hay sanidad, se han hecho cosas muy importantes. Las obras que comencé en 2010”. En mención a las obras deslizó la de la planta depuradora en General Madariaga que los concejales visitaron en la mañana del miércoles. Una gran inversión abandonada que fue sistemáticamente el caballito de batalla de todas las elecciones por más de veinte años del MUPP y que aún, Pinamar sigue esperando.
El “Presupuesto y la Seguridad” también fueron motivo de su análisis político.
Navegando en el túnel del tiempo volvió a criticar al Concejo por la falta de presupuesto: “El presupuesto no alcanzó nunca, fue un esfuerzo muy grande”. Su idea está lejos de este Concejo que corrió el riego de los que después se iba a confirmar, ya que confiaron en Muriale al otorgarle un aumento presupuestario en balance para no desfinanciar al Estado y corregir la ecuación CAPBA que se discute en la Justicia.
Veto de por medio Muriale se quedó con todo.
En dirección al legislativo le dedicó otro párrafo a los actuales concejales, alabó el buen trabajo de sus dos ediles (Elizalde – Rapalino-), y por añadidura mencionó “a algunos que colaboran en alguna medida pensando en la comunidad”. ¿A quién se habrá referido? Mientras que de los otros ediles dijo: “No te dejan gobernar. Todo el día pidiendo informe te quitan las ganas. “Lamentablemente Pinamar no tiene dirigentes con capacidad para el 2015”. No obstante y ante la pregunta ansiosa del conductor declaró: “No voy a ser candidato, tengo que terminar el tema mío de injurias en la Justicia” y se pronunció por la candidatura de Muriale.
De su relación con “Hernán” expresó: “Nos reunimos constantemente estamos tratando de conseguir algunas obras” y aseguró que la administración de Muriale “no le escatima nada de presupuesto a la Seguridad”. Mal momento eligió el añejo intendente para su afirmación. Ayer la página de Facebook del HCD publicó fotos que reflejan el estado calamitoso de las comisarias del Partido.
Luego, arrastrado adecuadamente por el periodista le tocó el turno a Baldini y a modo de mensaje respondió: “Siempre nos dedicamos al turismo, mi familia y yo, no me quieran cambiar la bocha. Siempre hemos tenido un plan de turismo modesto. El mejor asesor es el pinamarense no quieras inventar nada. Hasta cambiaron los colores del Municipio.
Creo que le pusieron rojo”. Las críticas del ex intendente se dirigían al Secretario de Turismo, a los gastos de la repartición, los viajes y el manejo de marketing que implementó. “Nuestro destino no es masivo, es estacional. El pronóstico y el perfil es tener gente en enero, febrero y marzo”, remató Biaggio Altieri.
Al despedirse entre tanta cordialidad esbozó un deseo: “Espero que la corte se pronuncie pronto me he sentido muy dolido con esta gente, la familia me la tocaron mucho” (sic).
No hay comentarios:
Publicar un comentario