LA IRRESPONSABILIDAD DE LOS PADRES, SE COBRO UNA NUEVA VÍCTIMA

Un chico de diez años murió ayer luego de sufrir un accidente con un cuatriciclo en una de las playas de la ciudad de Pinamar. El menor identificado como Tomás Agreste, viajaba en la parte trasera del vehículo, que era conducido por un familiar suyo, de tan sólo 15 años, quien quedó internado en el Hospital Comunitario de Pinamar.
El accidente fatal ocurrió a las 18.45 en la zona de los médanos del norte de Pinamar, zona conocida como La Frontera, a la altura del parador “El más allá”. Ese lugar es el epicentro de los cuatriciclos, las camionetas 4x4 y las motos, donde circulan casi sin ningún control.
El cuatriciclo, que era conducido por el chico de 15 años, iba a alta velocidad por la playa cuando, al final de un médano, el conductor perdió el control y ambos salieron despedidos del vehículo, que cayó sobre ellos produciendo la muerte del más pequeño.
No se pudo confirmar si los menores llevaban casco o no al momento de la tragedia.
Un médico del centro clínico le confirmó a Clarín que hoy por la mañana le realizarán la autopsia al menor para terminar de confirmar los traumatismos que ocasionaron su muerte.
La familia Agrete es oriunda de la zona de Hudson, al sur del Gran Buenos Aires. El padre, Fernando Agreste es médico y vive en country Abril, uno de los más exclusivos de la zona.
El cuatriciclo que manejaban los menores es un Honda modelo 400, uno de los de más alta cilindrada en el mercado. Tiene un motor de cuatro tiempos y alcanza fácilmente los 100 kilómetros por hora sobre la arena.
Los accidentes trágicos de menores en cuatriciclos es una historia repetida cada verano, en especial en el municipio de Pinamar.
Lo cierto es que en el área de la playa de La Frontera, una zona privada donde no pueden actuar las autoridades, el único control que existe es el que decide aplicar cada individuo personalmente. En las playas se ven circular vehículos conducidos por personas con cascos y a una velocidad moderada, pero también son habituales los menores pilotando cuatriciclos, los que circulan a alta velocidad y sin ningún tipo de protección. El único límite que más o menos se respeta es el de las filas de caminetas y gazebos que se instalan en los paradores “El más allá” y “El límite”: fuera de esa zona, las 4x4, los “cuatris” y las motos circulan sin ningún tipo de control por parte de las autoridades de Tránsito. Incluso, cerca de las playas.
Desde hace años, se registran unos 50 accidentes con cuatriciclos durante la temporada. Y si bien es más fácil encontrar a menores al volante o a adultos sin cascos en la zona de médanos, también se ven circular a muchos en el sector urbano. El año pasado, durante el mes de enero, la Comuna labró un promedio de 100 multas por día, pero el problema parece no tener solución y año a año va en aumento.

NOTA: EXTRACTO DE LO PUBLICADO POR EL DIARIO CLARIN EL 30/01/2014