Cuando llegamos al HCD, la misma estaba avanzada y casi por terminar, estaban presente varios de los actuales permisionarios, público afín y el intendente de Pinamar.
Fueron 25 puntos que conformaron esta ordenanza complementaria, los cuales parecían irse aprobando rápidamente, debido a las discusiones en los días previos. Donde existió discrepancias fue en el punto 25 (el último), el cual permite la transferencia de las UTF (balnearios) por aquellos que hayan resultados adjudicatarios, aún antes de encarar su demolición y construcción con las nuevas directivas ambientales. El resultado de esta votación fue el siguiente: 7 votos por la afirmativa, 4 por la negativa (Taurizano, Avila, Ventoso y Ocampo), y 1 abstención (Viotti).
Esto permitiría un traspaso inmediato luego de la adjudicación, con un gran poder de reventa sin contar el municipio con ningún derecho –establecido en una tasa- en el cual se viera beneficiado por esa transacción. Por lo tanto estaríamos ante un hecho similar al ocurrido cuando el remate de lotes y casas realizado hace un par de años atrás en el Teatro de la Torre, en el cual todos los lotes puestos a “remate” fueron comprados por la famosa “liga”, y revendidos horas después en un restaurante céntrico de Pinamar, dejando pingües ganancias en escaso tiempo a la “liga”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario