Mientras Figueredo cuestiona la actuación del Gobierno y la Junta de Calificaciones, a la hora de otorgar beneficios laborales, Muriale insiste en la modificación de decretos que no pueden ponerse en práctica porque el Presupuesto 2013 no está aprobado. (y se desconoce).
Luego de la entrevista realizada a Carlos Figueredo, subsecretario de Coordinación Administrativa y Gestión, sobre las diferencias que mantiene con el Poder Ejecutivo, Pionero consultó al director de Administración, Roberto Baena, acerca de la situación del “borrador” de decreto que cuenta con la firma del intendente interino, Hernán Muriale, y del secretario de Servicios Urbanos, Alberto Morales. Este “borrador”, fechado el 21 de marzo, da por nombradas como jefes de departamento a cinco personas pero carece de la rúbrica del entonces secretario de Hacienda (ver nota principal).
Baena dijo a Pionero que el documento lo tenía Muriale: “Están a resolución del intendente; estoy esperando que me los mande”. Justificando el plural utilizado, y para sorpresa de esta periodista, el funcionario agregó: “Este paquete de decretos lo tiene el intendente. Todo tiene que ver con lo mismo: los ascensos y categorizaciones. Yo estuve de vacaciones pero me enteré de los cambios que hubo y están pendientes de la resolución de este tema y está Juan Carlos León (flamante secretario de Hacienda) diciendo que va a asumir el tema”.
Este dato –que los decretos 0445/13 y 0447/13, firmados el 26 de febrero, están siendo modificados– fue corroborado por la directora de Personal, Marta Villanueva, y, al día siguiente, por parte de los miembros de la Junta de Calificaciones, Ascensos y Disciplinas, integrada por miembros de la cúpula sindical y funcionarios.
Considerando que los decretos mencionados se refieren a ascensos y re-categorizaciones, es importante tener en cuenta que todas las promociones deben estar contempladas en el presupuesto. Si el presupuesto no está aprobado, ningún ascenso se podrá plasmar. ¿Por qué el Ejecutivo los está modificando, entonces?
Por efecto de la aprobación del cuestionado Código Tributario (CT), desde enero, los trabajadores perciben el aumento acordado con el sindicato, ya que el Poder Ejecutivo tiene la potestad de dar aumentos. Pero, ¿cómo el Gobierno va a cambiar los decretos mencionados, si el presupuesto no está aprobado? Tal como explicó Figueredo, primero se debe aprobar el presupuesto y, con esa conformidad, se elaborará el decreto con los ascensos.
Ese es el orden de los pasos. Y esa fue la respuesta que dio el mismo Poder Ejecutivo a esta periodista a través de su subsecretario Carlos Figueredo. O sea, ¿el Ejecutivo se contradice a sí mismo?
Esta revelación brindada por Baena, Villanueva y parte de los miembros de la junta remite a las palabras de Figueredo: “Se puso el carro delante del caballo”. El presupuesto sería el caballo y los ascensos, el carro.
Seguimiento de los hechos
El 11 de marzo, el Concejo Deliberante aprobó el CT en una asamblea que es cuestionada por los mismos ediles, por más de una institución y por partidos políticos. Incluso Daniel Lamas, concejal oficialista, cuestionó seriamente esta sesión y este CT.
El CT está judicializado; por lo tanto, todo indica que el presupuesto ni siquiera será tratado. Primero se deben aprobar el CT y el presupuesto; luego, los decretos con los ascensos. Así lo marca la norma. Mientras el CT garantiza los ingresos, el presupuesto debe contemplar, también, los egresos. O sea, debe estipular qué porcentaje está destinado a los haberes de los empleados, por ejemplo.
Pero, si el presupuesto no es aprobado, el Ejecutivo deberá gobernar con el Presupuesto 2012, que no contempla ni re-categorizaciones, ni ascensos. Tampoco, la creación de nuevas dependencias ni jefaturas. Ante esta situación, el Poder Ejecutivo y el Deliberante deberán reunirse para acordar las adecuaciones necesarias en las partidas que son imposibles de modificar.
Por más que la presencia de miembros de la comisión directiva del sindicato en la Junta de Calificaciones pretenda estos ascensos, el entonces secretario de Hacienda ya dijo que no. Figueredo explicó a Pionero que no los había incluido en el presupuesto.
Por eso, aunque mañana el HCD apruebe el Presupuesto 2013, estos ascensos, re-categorizaciones y creaciones de áreas no son factibles de ser implementados: no están incluidos en el presupuesto de gastos….elaborado por Figueredo.
¡Qué detalle!
El Presupuesto 2013, que fue presentado en el HCD en diciembre pasado, a solicitud del intendente interino, el 6 de febrero retornó al Ejecutivo. O sea, luego de la cuestionada y violenta asamblea que logró la aprobación del Código Tributario, el Ejecutivo solicitó el retorno del proyecto presupuestario.
“Si vos no me das el presupuesto, ¿cómo justifico el CT que me presentas? Hernán dice que para gobernar necesita $258 millones. ¿Para qué necesitas los $258 millones? ”, se preguntó Lamas.
La respuesta viene sola: para cubrir todos estos favores políticos que tanto le cuestan al erario municipal. Tal vez, la presencia de Pionero en las oficinas preguntando por estos decretos haya alarmado al avispero. Si a eso le sumamos las declaraciones de Figueredo, las razones de estas modificaciones estarían encontrando su explicación.
A la luz de los acontecimientos, y de las contradicciones del Ejecutivo, no es difícil pensar que, una vez más, éste pretende forzar voluntades para lograr la aprobación del Presupuesto 2013, ese que se desconoce, y que ahora sí incluiría estos preciados beneficios negados por el ex secretario de Hacienda.
Evidentemente, “esto ya es demasiado grande para que lo maneje una mesa chica”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario