Uno de los hombres más importantes del movimiento es Ricardo Grispino, militante peronista con una larga e importante trayectoria de trabajo en Pinamar. Gripino tiene cuatro hijos varones, “todos son profesionales”. Y tiene tres estudios universitarios, aparte de los estudios técnicos.
“Qué nos motivó participar en el escenario político de Pinamar? Nos motivaron muchas inquietudes: la falta de seguridad, la falta de limpieza…A esto se agrega que, en tiempos de turismo, se vive una ciudad muy descontrolada” explicó Grispino a el periodista de Estación Marina, Sergio Michnowicks. “Venimos trabajando hace más de dos años con Nicolás para armar esta agrupación. No ha sido fácil. Nosotros empezamos de cero juntando gente, puerta por puerta. Fuimos hablando con la gente y la gente nos acompañó y se empezó a entusiasmar” dijo Grispino, peronista de 77 años. “La inquietud máxima es ayudar a Pinamar a que sea una localidad superior a Puta del Este porque tenemos todas las condiciones para llegar a esto”, agregó.
Ante la consulta sobre su trayectoria como peronista y su labor en Pinamar, Grispino compartió una larga historia de militancia y trabajo: “Yo estuve con Perón desde que llegó hasta que se murió. Fui el organizador de la primera Secretaría de Gobierno de la Presidencia de la Nación, en época democrática. El primer secretario democrático fue el Coronel Damasco y yo estuve ahí como Director General Ejecutivo trabajando intensamente en la creación de la Secretaria y armando la estructura. Así que, en lo que hace a organización, tengo mucha experiencia porque he trabajado a nivel nacional, provincial y municipal”.
Gripino se refirió, también a su experiencia en política de “larga data”. Fue funcionario de la UVES (Unión de Estudiantes Secundarios) “que Perón conformó en esa época. Estoy hablando de los años´50 Tengo toda la vida dedicada a la política técnica”.
“Ahí tiene un poco de mi historia en Pinamar”
La labor de Grispino es Pinamar es intensa y de gran importancia. En la época del cólera, su rol fue esencial para controlar este flagelo que, en los ´90, tanto preocupaba a la gente”.
En Pinamar “estoy hace mucho tiempo: yo era Director de Fiscalización sanitaria del Ministerio de Salud y vine en 1990 a instalar todo el control bromatológico. Hice un operativo muy grande desde la zona de entrada del Río San Borombón hasta Bahía Blanca. Hice el control con 450 inspectores y, especialmente en Pinamar porque, en ese momento, estaba la problemática del cólera. Yo instalé, para el anterior intendente, todo el laboratorio de control del cólera. ¿Por qué en Pinamar? Porque en la época de cólera - pleno verano - viene muchísima gente a la costa. En los ´90 habíamos calculado más de 8 millones de personas y yo pensé en este lugar porque acá, en el verano, vienen muchos trabajadores de Bolivia y Paraguay. Por eso prioricé este lugar. Ahí tiene un poco de mi historia en Pinamar”.
Grispino agregó: “Yo venia a Pinamar de vacaciones y tengo una larga historia acá. Tengo mi casa acá. Mucha gente dice que somos de afuera. No somos de afuera, somos argentinos que estamos en el país, y cualquiera que viene a un lugar y lo ama y lucha, tiene derecho a participar en política”. Así, en VISUR, a la juventud y el ímpetu de Nicolás Alfaya, se suma la experiencia y la convicción de Ricardo Grispino.
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