DECLARACION DEL CONCEJO DEL PARTIDO JUSTICIALISTA DE PINAMAR

Escándalo y paro. Vergüenza. Pinamar no da más.

 Hoy, la medida de la empresa Montemar de suspender a veinte trabajadores por que supuestamente esta en apuros económicos y no les puede pagar, dada la baja recaudación del servicio local, provoco otro capitulo de vergüenza y desamparo institucional y comunitario.
Los chóferes, en reclamo pararon el servicio local en horas de la tarde, incluyendo el interurbano, (Madariaga-Pinamar-Gesell) sin ningún aviso a los pasajeros lo que trajo aparejado entre otros casos, los niños en las Escuelas no solo de Pinamar sino también de Madariaga.
Llegaron dirigentes de UTA a copar la parada, y la prepotencia e intolerancia le gano a la razón.
Barras de un club marplatense, alcoholizados robaron las herramientas de la estación de servicio Shell, Bunge e Intermedanos . Se pegaban entre si, generaron caos, desorden y la policía debió custodiarlos hasta que abandonaran la ciudad. Un dato, los inadaptados se transportaban en una unidad de Rapido del Sud perteneciente al mismo grupo empresario de Montemar.
Con criterio, el presidente del HCD, Alberto Germain, suspendió la sesión prevista para las 18, temiendo conatos de violencia y una inexplicable presión que desde la empresa con el apoyo de estos falsos trabajadores del transporte, le quieren imprimir a nuestros concejales para que aumenten a $ 4,00 el boleto local. Ahora bien la sesión de realizara mañana a las 9:45, quien garantiza que no pasará nada?.
Mas temprano, en Tritones 90, el único concejal que se acerco a hablar con los gremialistas fue Edgardo Paso, mientras algunos trabajadores blandían sus telegramas donde la empresa les notificaba la suspensión.
Demasiado tranquilos se los podía ver, para ser que la suspensión seguramente les producirá problemas económicos. Muy enojados con los concejales y pocos disgustados con sus empleadores, queda claro que los chóferes siguen siendo instrumento de apriete, para que la empresa termine favorecida con el incremento buscado.
Una locura, esperemos que el Ejecutivo este, esta vez a la altura de las circunstancias, defendiendo al usuario y exigiendo el cumplimiento del servicio.