Por Alberto Lettieri, especial para NOVA
Los insistentes reclamos de unidad en la provincia de Buenos Aires parecen estar a punto de concretarse. Según han dejado trascender fuentes bien informadas, las bases del acuerdo entre Unidad Ciudadana, el PJ y el Frente Renovador serían las siguientes:
El Frente Renovador resignaría sus pretensiones a la Gobernación, para permitir la composición de una fórmula de unidad integrada por un candidato designado por Cristina Fernández de Kirchner, y un o una vice consensuada por los intendentes.
A cambio, el Frente Renovador solicita un piso de 15 legisladores provinciales. Actualmente cuenta con 12 diputados propios y 4 aliados, pero la mayoría concluye su mandato este año, ya que fue electa en 2015. Esta pretensión está en discusión con los intendentes y el cristinismo, ya que sólo entran en disputa 46 bancas de las 92 que componen la Legislatura y deben garantizarse cargos para los alcaldes y La Cámpora.
En el caso de los senadores, sólo se renuevan 23 bancas, por lo que allí también el tira y afloja aún no ha encontrado un punto de equilibrio.
En lo referido a las elecciones municipales, se habilitaría la libre presentación de listas, que irían colgadas de una boleta provincial común. Esta alternativa actualmente sería inviable en virtud del Decreto restrictivo sobre las colectoras que firmó Mauricio Macri, pero se confía en hacerlo caer mediante una presentación judicial. Al respecto, se sostiene que "ninguna reforma electoral puede realizarse en año de elecciones y menos por decreto".
Como un gesto de convivencia adicional, se le garantizaría a Sergio Massa el municipio de Tigre, donde el resto de las agrupaciones que integran la alianza se comprometerían a no presentar listas. Todavía estaría en discusión si se adoptarán criterios similares en otros distritos.
Aún falta, pero la unidad parece ir tomando forma en la provincia de Buenos Aires.
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